Fiat inauguró ayer oficialmente su planta de producción de tractores y cosechadoras de las marcas Case y New Holland, en el complejo de Ferreyra, Córdoba, en la que invirtió $ 450 millones. En el mismo acto, al que asistió la presidenta Cristina Kirchner junto a la Ministra de Industria, Débora Giorgi, se inauguró la producción de motores FPT, en la que desembolsó otros $ 283 millones. En ambos casos, la compañía recibió un crédito del Bicentenario para financiar parte de la inversión.

La inauguración contó con la presencia del presidente mundial del Grupo Fiat Industrial, Sergio Marchionne; el titular de Fiat Industrial Argentina, Natale Rigano, y el CEO de la división nacional automotriz, Cristiano Rattazzi, entre otras autoridades de la compañía.

En un nutrido acto acompañado de los ya tradicionales bombos de fondo, Giorgi indicó que “como resultado de la política nacional de desarrollo del sector de maquinaria agrícola, tanto CNH como FPT decidieron, en 2011, invertir en el país”.

Las restricciones a las importaciones de maquinaria, que datan de 2010, llevaron a que muchas empresas decidieran invertir en el país. En el caso de CNH, ese anuncio se convirtió en una planta de 32.800 metros cuadrados cubiertos de fábrica, con una capacidad de producción de 2.000 cosechadoras y 4.000 tractores.

CNH tenía sólo presencia comercial en Argentina, abasteciendo al mercado local con maquinaria importada desde Brasil, Europa y Estados Unidos. Asimismo, FPT volvió a producir en el país, luego de casi 30 años, motores de gran tamaño para equipar a los camiones producidos por Iveco, también de Fiat.

CNH y FPT Industrial planean llegar en 2015 a comprar piezas locales por unos u$s 150 millones anuales para producir en el país. La intención es lograr cada vez un mayor contenido local para la producción.

La inauguración de Fiat no llega en el mejor momento del mercado, cuando la demanda de maquinaria agrícola en el país sigue congelada porque los productores guardan sus granos como reserva de dólares en lugar de invertirlos en estos productos. Aun así, responde a una estrategia de mediano plazo, además de ser una reacción a la imposibilidad de importar.

La planta creará 800 nuevas pl

azas de trabajo y generará nuevas exportaciones por u$s 100 millones al año. Además, permitirá sustituir importaciones, en el mediano plazo por otros u$s 100 millones.

El gobierno nacional aprobó 19 proyectos en el Fondo del Bicentenario por un monto total de $ 525 millones para inversiones en el sector de maquinaria. Además, acaba de prorrogar el Régimen de Bonos para Bienes de Capital, que concedió en 2012 al sector de maquinaria agrícola beneficios por $ 420 millones, aunque con importantes demoras en sus desembolsos.

Fuente: Cronista