El Banco Central de Turquía anuncia una fuerte subida de los tipos de interés al 12% El interés pasará del 7,75% al 12% para intentar frenar la caída de la lira.

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El banco central de Turquía ha anunciado este martes la subida de sus principales tipos de interés en 425 puntos básicos, del 7,75% al 12%, volviendo a niveles de 2012. La decisión se ha producido tras una reunión de emergencia para frenar la fuerte caída de la lira, que se ha devaluado un 25% en los últimos ocho meses tras los últimos escándalos de corrupción en el Gobierno.

Aunque la subida era esperada desde que el director del Banco Central, Erdem Basçi, la insinuara horas antes, ha sido más fuerte de lo que se preveía (se estimaba en torno al 9%) y ha hecho caso omiso de la oposición del primer ministro Tayyip Erdogan que ha respetado la independencia de la institución.

El Banco Central, que ha publicado una "carta abierta al Gobierno" en la que señala que la inflación en 2013 se ha desviado más de 2 puntos del objetivo marcado, ha justificado su decisión a través de un comunicado en el que hace referencia a los "recientes acontecimientos internos y externos" que "están teniendo un impacto adverso sobre la percepción del riesgo, dando lugar a una depreciación significativa de la lira turca y un pronunciado aumento en la prima de riesgo".

La institución ha avisado de que se mantendrá firme en el endurecimiento de su política monetaria a lo largo de los próximo meses y que tomará "las medidas necesarias a su alcance para contener el impacto negativo de estos acontecimientos sobre la inflación y la estabilidad macroeconómica".

Fuerte subida de la lira tras el anuncio

Nada más anunciarse la medida, la lira turca ha experimentado una fuerte subida, de más de un céntimo de dólar, para colocarse por encima de los 45,5 céntimos tras una jornada en la que se había estabilizado poco por encima de los 44.

El Banco Central explica en su nota que esta orientación hacia una política monetaria restrictiva se mantendrá "hasta que haya una mejora significativa en la las perspectivas de inflación" que la institución aspira reducir hasta el 5% a mediados de 2015 tras esta reorientación de la política monetaria.

La medida vuelve a colocar los tipos de interés en los niveles en los que se hallaba durante la mayor parte del año 2012, y desde donde había ido bajando hasta alcanzar su mínimo, un 6,5%, en mayo pasado.

Desde agosto, cuando el tipo se fijó en un 7,75 %, el Banco Central se había negado a emplear este instrumento para frenar la fuerte caída de su moneda, que ha perdido un 25% en los últimos ocho meses. El jueves pasado, el Banco Central intentó infructuosamente frenar el desplome vendiendo unos 2.000 millones de dólares de sus reservas de divisas, pero el efecto duró apenas unas horas.

Erdogan respeta la independencia del Banco Central

Por su parte, el primer ministro Tayyip Erdogan se ha opuesto abiertamente a la medida interesado en mantener el crecimiento económico ante el inminente comienzo de la campaña electoral dentro de dos meses.

Erdogan se ha enfrascado en una lucha contra lo que ha calificado como "el lobby de los tipos de interés" formado por especuladores que buscan ahogar el crecimiento y frenar la economía. "Me gustaría que supieran que, como siempre, estoy en contra de esta subida de los tipos", ha comunicado horas antes de la reunión bancaria.

Sin embargo, el primer ministro ha reconocido no tener autoridad para interferir en las decisiones del Banco Central que tiene "toda la responsabilidad" en la medida.

Evitar el 'efecto dominó'

Desde que el Banco Federal estadounidense anunció el año pasado un encarecimiento del dinero, se preveía que este flujo iba a disminuir y varios economistas acusan a las autoridades turcas de no haber hecho nada para mitigar los efectos.

Tras la subida, las reacciones internacionales han sido positivas, y analistas internacionales, como los de Société Générale, han a la "agresiva" subida y sostienen que posiblemente ha evitado un "efecto domino en los mercados emergentes", en referencia a Argentina, Sudáfrica e India, afectados por fuertes caídas de sus monedas nacionales.

Hayri Kozanoglu, profesor de Economía en la Universidad de Marmara University de Estambul, cree que la economía turca ha ido haciéndose progresivamente especulativa desde 2003 aunque ha sido ahora cuando "se ha hecho obvio con la crisis política". Según Kozanoglu, "el Banco Central ha perdido el control totalmente" y "no tiene hoja de ruta". Este experto considera que la inestabilidad política hace colapsar "la estrategia de crecer con capital extranjero", que es la que hasta ahora ha mantenido el fuerte crecimiento de Turquía.

El Banco Central turco ha estado luchando para contener la depreciación de la lira y el daño en la confianza de los inversores que conlleva tras el escándalo de corrupción que agitó el Gobierno y tuvo un impacto internacional con la retirada de estímulos monetarios por parte de Estados Unidos.

 

Fuente: Rtve.

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