Ser líder no sólo se trata de dar órdenes para que las personas realicen determinada actividad, es responsabilizarse, invertir tiempo y esfuerzo en nuestros compañeros de equipo, en ganarnos la confianza y saber dirigir el camino que seguirán los que están con nosotros, lograr que sean leales y darles el valor que se merecen.

Muchas veces desconocemos lo que conlleva ser líder, no sabes cuáles son tus responsabilidades, cuándo eres un emprendedor puedes ser un pésimo líder si no tienes esos conocimientos. Tal vez la rutina que ya adquiriste en tu trabajo puedan “justificar” tu mala forma de liderar, Jobomas te recomienda poner atención en estos aspectos para detectar si eres un pésimo líder.

#1. Promesas, puras promesas

Regularmente los malos líderes atraen con engaños a quienes estarán cerca, con: futuros prometedores, grandes cantidades de dinero de acuerdo a su desempeño laboral y la posibilidad de ir escalando en el organigrama, estas promesas raramente son cumplidas, los “líderes” que hacen estos compromisos pecan de manipuladores y pueden tener a todo el equipo de trabajo siempre en niveles que difícilmente dejarán esperanzados en recibir lo acordado. No prometas lo que no puedas cumplir, eso dañará la imagen que tienen de ti, tus empleados.

#2. Nunca rastreas lo que inicias

Algunas veces los líderes no entienden la importancia, que para su equipo de trabajo tiene, el contar con ellos para la resolución de problemas que aun les cuesta resolver por sí mismos, puede suceder que durante largos periodos de tiempo pueda estar pasando esto, cómo líder debes siempre rastrear y seguir lo que se realiza entre tu equipo de trabajo. Dar tu palabra también te compromete a ser íntegro, siempre da una respuesta sea positiva o negativa a una acción, así tus empleados o compañeros de trabajo te darán más de un voto de confianza.

#3. Sin miedo a nada

Una característica muy clara de un mal líder es el huir de las situaciones de confrontación encaminadas principalmente, a medir su desempeño laboral, esta conducta está relacionada al miedo, y al evitar enfrentar la realidad. Regularmente un líder en el ramo empresarial busca encontrar buenos resultados, pero si no saben llevar y enfocar los trabajos de la manera correcta pueden generar pérdidas. Estos malos líderes siempre andan de un lugar a otro evitando el contacto y la confrontación, para corregir esto debes trazar una línea que dirija con precisión lo que se espera de cada una de las acciones que realizas, para que puedas, en su momento, solucionar una confrontación de manera exitosa.

#4. Evitar responsabilidades

Es cierto que cuando las cosas no salen bien, a nadie le gusta aceptar la parte de responsabilidad que le corresponde en lo hecho, los que son malos líderes son los principales evasores de esto, siempre buscan justificar y echar la responsabilidad de estos errores en otras personas de su propio equipo. Esto es a consecuencia de que los “líderes” no son autocríticos y encuentran más fácil poder culpar a los demás. Les gusta ir moviendo las responsabilidades de un integrante del equipo de trabajo a otro. Elimina la disculpa de tu léxico, si te equivocas asume tu responsabilidad, detecta qué es lo que puedes cambiar o mejorar, no busques más excusas. Si quieres realmente ser un líder asume y se congruente con lo que dices y lo que haces.

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