Preparar con antelación una entrevista es algo fundamental si quieres superarla con éxito. Sobre todo ciertas preguntas que puedes entrenar, como por ejemplo tus defectos. Te contamos qué hacer para triunfar aunque expongas algunas de tus debilidades en una entrevista.
La búsqueda de trabajo es un proceso duro y en ocasiones agotador, así que es normal que en el momento en que consigues una entrevista de trabajo los nervios te jueguen alguna mala pasada. Sin embargo, no es el momento de distraerse. Preparar con antelación ese encuentro es fundamental para maximizar tus posibilidades de conseguir un trabajo. Siempre puede producirse un rechazo, pero si te preparas a conciencia puede que haya menos opciones de que eso ocurra.
¿Por qué insistimos en que debes preparar bien una futura entrevista? Porque es el momento que estabas esperando, tu momento para dar lo mejor de ti. Debes demostrar tu profesionalidad, tu entusiasmo y cómo puedes resultar beneficioso para esa empresa. No puedes decir lo primero que se te ocurra, tienes que ser consciente de lo que estás diciendo y cómo lo estás diciendo.
¿Significa esto que tienes que callarte cualquier fallo o debilidad que tengas? En absoluto, admitir las limitaciones y los fallos es algo humano que te ayudará a ganar credibilidad y además es muy valorable para las empresas. Contar tus debilidades en una entrevista es algo, en realidad, positivo, pero, hay que saber cuáles son las que puedes admitir delante de tu entrevistador. Por ejemplo, si te preguntan por ellas evita mencionar aquellas que creas que pueden estar relacionadas con el empleo al que optas o con las responsabilidades que puedes adquirir.
No es necesario mentir ni hacer uso de fórmulas manidas o frases ya demasiado repetidas. Hay formas de admitir estos pequeños fallos de manera que no solo quede claro que eres consciente de ellos, sino que además estás haciéndoles frente y corrigiéndolos.
La experta en desarrollo profesional Heather Huhman ha hecho un listado de las 5 debilidades más comunes y que pueden jugar en tu contra si quedan expuestas. Pero además te ofrece una buena manera de salir de esta situación.
Los 5 ejemplos de defectos para decir en una entrevista más comunes
1. "Solía ser un tanto desorganizado, pero ahora, a través de esta táctica mis habilidades de planificación realmente han mejorado"
Ser organizado es una de las cualidades más valoradas por toda empresa pero los reclutadores saben que no todo el mundo puede serlo. Seguro que estás trabajando en mejorar este aspecto de tu personalidad, por eso esta respuesta es la mejor que puedes ofrecer a tu entrevistador. Eso sí, no olvides explicar a qué método de organización te refieres, resultará muy interesante para tu entrevistador saber cómo te esfuerzas por mejorar.
Podrías probar, por ejemplo, con la técnica Pomodoro: se trata de una forma de organización del tiempo en la que divides tu tiempo en espacios de 25 minutos. Durante estos 25 minutos nada puede estorbarte; tras ellos, te tomas 3-5 minutos de descanso. Y cada 4 pomodoros (cada cuatro tandas de 25 minutos) te tomas un descanso de 15-20 minutos. ¡Sencillo y práctico!
2. "Antes entregaba mis informes en la fecha límite, pero ahora he comenzado a adelantar mi trabajo"
Ser capaz de ceñirse a un calendario de entregas es algo fundamental. Por este motivo lo mejor que puedes hacer es dar una respuesta como esta. Así dejarás claro que puedes entregarlo a tiempo pero que además estás trabajando por ser más proactivo y eficiente. Te implicas en la empresa y eso siempre es muy valorable.
3. "Solía trabajar en un único proyecto cada vez, pero ahora puedo atender a múltiples tareas y obtener mejores resultados"
Actualmente son muchos los trabajos en los que se exige llevar a cabo diferentes tareas al mismo tiempo. Los empleados polifacéticos son un valor al alza. Así que, si quieres transmitir a tu entrevistador que estás trabajando para convertirte en alguien más eficiente para asumir varias responsabilidades al mismo tiempo, esta es la mejor respuesta que puedes ofrecer. Habla sobre cómo estás aprendiendo a lidiar con ello y cómo te estás esforzando por ser cada vez más competente.
4. "Antes invertía demasiado tiempo en los proyectos, pero he aprendido a confiar en mis decisiones y ser más eficiente"
Una respuesta así puede dejar claro lo mucho que te involucras en los proyectos y el objetivo de la empresa. Eres un perfeccionista y esta es la mejor forma de demostrarlo. Si además puedes contar algún ejemplo concreto en el que hacerlo haya supuesto un éxito ayudarás a que tu entrevistador se convenza más de que eres la persona adecuada.
5. "Los nuevos proyectos me entusiasmaban y sin darme cuenta me sobrecargaba. Ahora he aprendido a reconocer mis límites"
Si te preguntan por tu capacidad para asumir retos quizás esta sea la respuesta que estabas buscando. Siempre es muy valorable tener empleados que estén dispuestos a entrar en nuevos proyectos. Recuerda mencionar algún ejemplo que lo demuestre y también habla de cómo has aprendido a priorizar y a decir que no.
¿Cómo hablar de los defectos en una entrevista sin que suponga una desventaja?
Puede que tus defectos no estén entre estas 5 debilidades más comunes: por ello te damos a continuación algunos consejos para que aprendas a hablar de tus defectos sin que éstos supongan una desventaja en tu candidatura y puedas contar con seguridad tus debilidades en una entrevista:
Más consejos sobre cómo mostrar tus debilidades al reclutador
Además de estas 5 propuestas, te aconsejamos también que tengas en cuenta los siguientes aspectos:
Fuente: Universia.net
Autor: Anónima
Compartir
Coaching no es psicoterapia, y el coach que te diga que puede ayudarte a resolver tus problemas psicológicos falta a la ética...
seguir leyendoPleno verano, la estación más calurosa del año y te llaman para una entrevista de trabajo. Si has pasado los...
seguir leyendo