¡Mujer de éxito! Usa estos 3 tips para tener más confianza en el trabajo

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Me ha pasado algunas veces en la vida y tal vez te ha pasado a ti. Estoy en una situación arriesgada (entrevistando al primer ministro, dirigiendo una junta importante, dando un discurso frente a mucha gente) y de repente mi mente se va a otra parte y me pregunto por qué alguien habrá confiado en mí para hacer esto.

Conforme ha pasado el tiempo, pienso menos en eso y ocupo mi tiempo en cosas más productivas. Pero aun así siempre lo pienso, sobre todo cuando entro a un territorio que no me es familiar.

Este tipo de pensamiento usualmente es llamado síndrome del impostor. He hablado con muchas personas, mujeres especialmente, para darme cuenta que la mayoría de nosotros nos sentimos así a veces porque tenemos una crisis de confianza.

Es importante que solucionemos esto, ya que el nivel de confianza que exhibamos puede ser tan importante como la capacidad que tengamos para tener éxito en diversas situaciones. La confianza es lo que nos da el coraje para actuar de forma competente. Te comparto tres estrategias para sentirte más seguro en lo que haces. La primeras dos vienen de investigaciones que han recibido mucha atención de parte de los medios, la última está basada en mi propia experiencia.

1. Cambia la forma en la que hablas contigo mismo. Hay una gran historia de Laura Starecheski sobre la curiosa ciencia de hablar solo. Resulta que muchos de nosotros nos regañamos o criticamos de manera que destruimos nuestra confianza y afectamos nuestro comportamiento. Los investigadores dicen que es muy efectivo contrarrestar esta actitud negativa pensando mejor en cosas positivas.

Esto puede sonar como algo tonto, mirarte en el espejo y decir ?¡daré un gran discurso hoy!? tal vez no revolucione nuestra auto percepción e incluso puede sentirse como una auto afirmación. De hecho puede estresarte aún más. Pero las investigaciones muestran que si nos hablamos en tercera persona las cosas salen mejor. Aparentemente, usar la tercera persona nos dará un poco de distancia emocional y nos permitirá darnos esa charla motivacional que le proporcionaríamos a otra persona.

2. Cambia la forma en la que te comportas. Resulta que no sólo nuestros pensamientos pueden moldear nuestra confianza, nuestros movimientos también. La psicóloga social Amy Cuddy hizo un estudio sobre las señales no verbales y cómo éstas nos afectan.

Si nos encorvamos y nos hacemos más pequeños sentimos que tenemos menos confianza. Si tenemos una pose de poder, nos sentimos poderosos y somos percibidos así. Nuestro cuerpo cambia nuestra mente, dice Cuddy. ¿Su consejo para evitar el síndrome de impostor? Tómate dos minutos para para adoptar una pose de poder antes de entrar a una situación retadora. Como ella lo pone ?si sientes que no deberías estar en un lugar, finge. No finjas hasta que lo consigas - finge hasta que te conviertes en eso?.

3. Cambia tu auto descripción. Ninguno de nosotros es perfecto, todos cometemos errores regularmente. Cuando me adueño de esta parte de mí misma y soy abierta respecto a mis imperfecciones y errores, me siento paradójicamente más confiada. Hay algo sobre cambiar mi humildad interna y el fracaso que me hace sentir más fuerte. Me permite ser mejor al disculparme, aprender de mis errores y crecer. Es algo incómodo, pero me da poder de cierta forma. Yo tengo el control de mi propia narrativa, sin importar los errores.

Fuente: entrepreneur.com
Autor: Katya Andersen

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